3.2.2. La llibertat externa com a requisit per a la moderació
Jordi | 18 de juliol de 2020“Más no se domina la bestia encerrándola en una jaula. No hay moralidad sin libertad. Si un bárbaro deja libre su bestia, eso no es libertad, sino falta de libertad. Para poder ser libre es preciso que antes sea vencida la bestia. Esto acontece por principio si el fundamento y la fuerza motriz de la moralidad son sentidos y percibidos por el individuo como componentes de su propia naturaleza y no como limitaciones externas. ¿Más cómo puede alcanzar el hombre esa sensación y esa inteligencia si no es a través del conflicto de los opuestos?
C. G. Jung, Tipos psicológicos, p. 258.